El #Perú es un país donde la mentalidad masculina aún dispone la mirada de la sociedad, y donde las diferencias de #género son muy marcadas.

De tratarse sólo de ideas y no de la agresión corporal que reciben las #mujeresperuanas, aún así estaríamos hablando de #discriminación de sexo.

Los 64 casos registrados este año de #feminicidio, sin embargo, sustentan esa visión arcaica que se mantiene viva en el país.

Una encuesta ejecutada este año reveló que el 64% de la población interrogada conoce a una mujer víctima de #violenciafísica.

Lo paradójico, y duramente entendible, es que las #agresiones contra la #mujer no terminan de verse como tal en la psique social ya formada.

Muchas veces es la mujer quien colabora con esta realidad, y no cambiarla, al aceptar el #hostigamiento que su pareja le realiza.

Y se ve ejemplificado al estar demostrado que solo el 26,8% de las mujeres #maltratadas denuncia el hecho.

Pero además, al #denunciar en las comisarías, según la ONG Manuela Ramos, las #mujeres son cuestionadas por los propios policías.

Se habla pues, no sólo de hecho concretos, sino también de todo un #sistema armado en el tiempo y que recién se cuestiona.

La #MinistradelaMujer, Aída #GarcíaNaranjo, se ha convertido en el estandarte oportuno en este sentido que propone #sanciones de 15 años contra victimarios.

Es un paso importante, pero aún faltan más por dar.